Un caserío se ha derrumbado esta mañana en el barrio Gesalibar, de Arrasate (Gipuzkoa) y ha atrapado a sus ocupantes, al menos dos personas, una de las cuales ha fallecido, según ha confirmado en Radio Euskadi el propio teniente alcalde de la localidad guipuzcoana, José Ramón Askasibar.
En el inmueble viven tres personas, aunque de momento los servicios de emergencias solo han localizado a dos: una mujer que presentaba politraumatismos y que ha sido ya trasladada al hospital y el hombre que permanecía inmóvil y cuyo fallecimiento ha sido confirmado.
Se trata de la pareja propietaria del caserío, de 65 y 63 años de edad, en el que también vive otra mujer, hermana de la herida y que no ha aparecido entre los escombros.
El caserío ha quedado en muy mal estado, hasta el punto que Askasibar ha señalado que "no queda piedra sobre piedra".
En el lugar, el caserío "Aldape", situado a unos setenta kilómetros de San Sebastián, se encuentran dotaciones de bomberos, sanitarios, policías y perros especializados en la búsqueda de personas, bajo la coordinación de un técnico de Emergencias del Gobierno vasco.
El suceso ha ocurrido sobre las siete y cuarto de la mañana cuando un vecino ha alertado a la Policía vasca de que el caserío se había derrumbado. Al parecer, la causa puede haber sido una explosión de gas, aunque este punto aún no ha sido confirmado por los especialistas de la Ertzaintza.
El teniente de alcalde ha precisado que no se han visto afectados vecinos porque el caserío más próximo al derrumbado se encuentra a 200 metros de distancia.
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